En las trincheras el peligro que corrían los hombres era constante, desde enfermedades, pie de trinchera hasta morir abatido por francotiradores. De ahí la necesidad del uso de periscopios, con los cuales los soldados podían vigilar al enemigo sin recibir un disparo.
Algunos soldados cuentan que los condiciones de vida en las trincheras eran horribles, no solo enfermedades, el peligro constante sino la incomodidad de pulgas y garrapatas todo el tiempo, algunas ratas parecían mas bien gatos. Sin olvidar la putrefacción de los cadáveres que no eran enterrados.
Durante los bombardeos con artillería era común que los cadáveres se salieran de sus tumbas por efecto de las explosiones en el suelo.
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Periscopios
Gracias a estos ingeniosos artefactos los soldados podían vigilar y disparar sin correr el peligro de ser abatidos por francotiradores enemigos.
Porra de Clavos
Las porras de clavos fueron muy utilizadas en los enfrentamientos dentro de las trincheras, dando lugar a la forma de guerra mas brutal "el enfrentamiento cuerpo a cuerpo".
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